Casi me caigo del sofá cuando me encuentro a Justo Gallego en un anuncio de refrescos. Para variar, no lograba acordarme hasta que decidí comentarlo aquí y me fijé más anoche, a propósito. El verano pasado quedé fascinada por este personaje a raíz de un documental, y me dediqué a buscar información... y a medio en serio, medio en broma planear una visita a Mejorada del Campo -¿te acuerdas, Mary-Anne? Te pregunté si me acercarías en coche, si lograba ir a Madrid...
Pero el shock que sufrí al ver a JG en un anuncio rollo qué-guay-que-es-el-pavo-este no habría sido tan grande si no fuera porque un spot antes habían utilizado uno de mis síndromes favoritos, que por cierto sufro yo de vez en cuando.
Ya sabe más de uno lo que me ha jodido que Movistar me cogiera una de mis canciones. Admito que la
letra* no es lo que me enganchó, aunque tiene un efecto mesmerizador... pero fueron noches y noches brincando al ritmo del tanaana-tanaana intentando no pisarles la punta de las botas a los otros siniestros en pleno exceso hipnótico. Y ahora, cada vez que escucho un trocito de la canción me pregunto qué será lo próximo que saquen estos creativos que, obviamente, son de mi generación aproximadamente y comparten recuerdos... Acto seguido me siento increiblemente vieeeeeeja, como cuando se oían quejas por utilizar a los Beatles y similares ;)
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*Mary-Anne, tú ya lo sufriste y, encima, hace poco lo discutimos ;)
1 comentario:
enorabuena por lo del curro. ya tengo el otro blog en marcha. echale un vistazo.
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