Ayer tenía reunión en el colegio. Salí de casa de Eva, de ayudarle con su trabajo sobre adolescencia y programas de reinserción, diciendo "No voy a liarme en ninguno de los proyectos. No me voy a dejar engatusar para organizar nada, como mucho echaré una mano para la fiesta de Els Jocs Florals y la de fin de curso, que se está empezando a coordinar ya."
Bueno. De entrada, hoy hay otra sesión de cine y a las 3 tengo que estar haciendo palomitas para un número indeterminado de niños, y ayudando a bajar las sillas para montar el 'cine' en el gimnasio.
Claro que el jueves que viene estaré en la 'brigada dels jocs florals' como se autodenominan (sic), y cuentan conmigo para ayudar en la fiesta de fin de curso... Logré meter baza para frenar unos talleres ridículos que no tenían mucho sentido (se había modificado una idea de años anteriores, y quedaba en actividad frenética a marchas forzadas para no dar apenas resultado visible).
Y.
Claro.
La portavoz avisó que necesitaban nueva secretaria (o secretario, pero apenas había representación masculina en la junta) para llevar al día la docuemntación de las subvenciones, asistir a todas las reuniones y hacer el acta correspondiente... Y me miraron a mí, haciéndome guiños y gestos de complicidad. Ya había dicho hace tiempo que lo que no quería eran responsabilidades a largo plazo. No sé ni lo que voy a hacer mañana, mucho menos que pueda asistir a reuniones de comités para firmar como representante y atenerme a los estatutos...
En fin. Os dejo adivinar lo que pasó.
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