Era el cumpleaños de mi sobrino, y había quedado con Poliwhirl para ir en coche con ella a la fiesta de cumpleaños.
Tenía visto un disfraz de pirata muy guapo y barato que le encantaría, y pensé en pasar a comprarlo el viernes por la tarde de camino a la clase particular -como no daba clase en la academia, tenía tiempo de sobras. Peeero mi tío me llamó el jueves, con su "Okok, Escucha una cosa, [...] ¿vale"? que no da pie alguno a decirle que no. En este caso, era un "mañana te coges el día libre, que yo no trabajo los viernes, y vaciamos del todo el piso".
¿Que me coja el quéeé?
Resumiendo, le prohibí que me tirara nada sin estar yo delante y quedamos en que pediría permiso para salir más temprano y pasar la tarde allí con él. Sólo diré que el piso ha quedado muy bien pero yo tuve que olvidarme de ir a comprar el disfraz y hasta tuve que anular la clase particular, quedando mal con el alumno y siendo 20€ más pobre.
Sábado. Tenía la mañana para acabar una traduccioncilla rápida para un amigo que prometí enviar a primera hora, hacer la compra, hacer la colada en una lavandería más barata que no había probado aún, volver a pasar por el otro piso a hacer una comprobación urgente que me tenía preocupada y comprar el regalo para mi sobrino, en otro barrio. Ah, y desayunar, y aclarar a qué hora y dónde quedar con Poliwhirl.
Me despierto, enciendo el portátil mientras Rastakid duerme, la traducción se alarga, desayunamos, traduzco un poco más, no estoy inspirada, limpio el piso y friego los platos, termino la traducción y la envío, me empiezo a agobiar viendo la hora, estoy a punto de salir a a calle con toda la colada, mi hijo con plásticos para reciclar, y Poliwhirl me llama diciendo que viene a buscarme en 40 minutos! La colada tarda 30 minutos en hacerse + otros 30 si se pone la secadora, y había pensado en hacer las compras mientras tanto.
Acordamos que me daría algo más de tiempo, no mucho más, y quedamos en nuestro antro de Shawarmas favorito. Llegamos corriendo a la lavandería. Meto a toda prisa la colada en una lavadora grandota, meto las monedas en la máquina y marco el número de la lavadora. Como no veíamos cajetín para el detergente que tenían otras lavadoras, metí el detergente a saco en el bombo mismo y doy al botón de encendido. Veo que la lavadora empieza a girar, pero comento con Hugo que Sí que tarda en entrar el agua, ¿eh? -En efecto. Era una secadora, y no había ningún encargado en ese momento, y si las lavadoras no se pueden abrir hasta terminar el ciclo, con las secadoras podría ser igual... Se me saltan las lágrimas.
En esas que entra una señora mayor y me pide ayuda para ver cómo funciona eso. Le dije "Lo siento, pero yo no le puedo ayudar. Acabo de meter la ropa sucia en la secadora, mire." Entra el encargado. Hugo le explica lo que ha pasado, porque me ve al borde del ataque de nervios, y me enseñan cómo se abre la secadora, y saco la ropa calentita, esponjosa... y oliendo a calcetines sucios!
Vale, 3,50€ y casi 15 minutos perdidos, saco corriendo todo y lo meto en una lavadora barata, pero no cabe, así que lo saco ya en una bola informe y lo meto en una lavadora de 6,50€, meto todo menos un calcetín que pierdo por el camino, Rastakid mete el calcetín mientras voy a la máquina a pagar, pongo el detergente y ...funciona. Bien.
Toca aprovechar esta media hora para comprar el regalo para mi sobrino. Vamos a la juguetería que hay en el barrio, pero está cerrada. Corremos a otra tienda, una papelería que a veces tiene juguetes y cosillas, pero está cerrada al mediodía. Acabo en un Todo a 1€ más o menos grande donde hay juguetes aceptables y hasta de marcas conocidas. Cogemos un futbolín pequeño pero molón por unos 10€ y pedimos que abran la caja para comprobar que no falten piezas (viendo el día que llevo) El futbolín mola, pero tiene una mancha de pintura roja en una de las barras que no se quita a pesar de que lo frotamos con alcohol, corro a buscar otro juguete y compro un juego que, por suerte, le ha gustado. Vamos corriendo a la lavandería y comprobamos que sólo han pasado sólo 22 minutos, aunque no lo parezca. Pues volvemos a salir corriendo a comprar la leche y cuatro cosas que necesitábamos, Rastakid se lleva las compras a casa mientras yo voy a recoger la ropa. Saco la colada, pesa como un muerto, y aún la tengo que llevar a casa y tender, pues aunque pagué una sesión de secadora, no hay tiempo ni la puedo recuperar. Llama Poliwhirl. Ya están en mi barrio. Y yo literalmente corriendo por el barrio con uno de esos bolsones del Ikea lleno de colada mojada.
"¿Voy pidiendo yo los Shawarmas para llevar, mientras llegas?" Buena idea. Ahora vengo.
Subo a casa (5 pisos, escalera estrecha, llevo la última hora corriendo por el barrio en plan gimkana) y pido a Rastakid que tienda algo de la ropa mientras yo envuelvo el regalo. que Poli ya está pidiendo los Shawarmas. Que vamos super tarde. Que Poli no quería arriesgarse a llegar tarde a la fiesta y que nos monte un pollo mi hermana.
Tendemos algo de ropa, envuelvo el regalo, y en 3 minutos estamos saliendo de casa de nuevo. Mierda.
La bota.
Llevo unas botas que me encantan pero están muy rotas. Creo que tanto correr seguido no ha ayudado nada a las suelas, partidas y rajadas desde hace años.
La. Bota.
Estaba ya en el último tramo de la escalera, a punto de pisar la calle, cuando veo que se me ha soltado toda la zona del talón. El talón se abre, y la suela cuelga. Si fuera a hacer algún recado por el barrio, podría seguir, pero no para ir a ver a la familia y a una fiesta de cumpleaños.
Rastakid, tú avanza que tengo que subir a cambiarme las botas.
¿Quééé?
Subo de nuevo los 5 pisos a toda prisa y cojo las otras botas, que tenía en una bolsa para llevarlas al zapatero también, y bajo corriendo, intentando no tropezar con una bota casi colgando al correr, con las otras en una bolsa para cambiarlas en el coche, con la bolsa enorme con el regalo de mi sobrino... y cuando se lo explico todo a Poliwhirl mientras comemos los shawarmas, me dice que lo tengo que contar en el blog ;-)
PD: ¡Y, encima, llegamos temprano a la fiesta!
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