¿Tanto me ha quedado para fregar?
Anoche la celebración improvisada salió muy bien.
Magda y yo cenamos mucho y muy rico en casa (albóndigas, conejo, ensalada, queso...), aprovechamos la tele nueva para tomar las uvas con ¡Belén Esteban!, dimos un buen tiento al Ron Brugal que me habían regalado y nos fuimos al Magic, a bailar hasta las 7 con Joan y Liliana.
De coña.
Todo muy "casero" y sin horteradas esta vez (no, no compré cotillón y ni vi espantasuegras en toda la noche) pero cambiamos de año entre risas y lapsus de memoria. Como tiene que ser!
Saludos, Liliana ;) ya puedes decirle que ha salido él en el post! :p
4 comentarios:
Bueno, te quedo el fregoteo pero, como compensación, también las sobras, eeh?
Yo también he empezado el año con resfriado y dolor de cuello, después del desfase de fin de año han ido a más...
Pero con buen sabor de boca, que se suele decir! :P
Sí, Magda, las sobras me sirvieron de coña para no cocinar estos días que estaba tan chafada...
Ayer me comí el conejo de tu madre, mira. Quiero decir... :P
Además, no es tanto quejarme del fregoteo como que de pronto vi muchos platos para tan poca gente, luego me acordé de que puse el pica pica en platicos separados, los de la ensalada... ¡pero lo primero que pensé fue eso, ¿cómo hay tantos? XD
Es que montaste la mesa en plan muy fino, platos para esto, platos para lo otro, vasos para el vino, vasos para los cubatas... Normal!
Y ya sé que no te quejas! Tampoco me quejo yo, ehem, ehem... de que te quedaras con el conejo que sobró. ;-P
Por cierto, de ron debió sobrar muy poco... :D
Publicar un comentario