No tenemos nada en contra de las pistas de hielo en sí. En Barcelona hay dos muy famosas, que todo patinador conoce. Pero la fantochada de destinar tanto dinero y tantos recursos energéticos a algo banal en tiempos de crisis nos jode. Las declaraciones iniciales con el motivo político por el que se crearía la pista, y luego el juego de olvidar esas mismas palabras y hablar siempre de "recuperación del comercio" es lo que nos molesta, cuando no es precisamente el comerciante de barrio el que está detrás de esto sino las grandes corporaciones que rodean la plaza.
La pista de hielo a cielo abierto más grande de Europa, en una ciudad mediterránea. ¿Y eso, se supone que es sostenible?
¿Cuánto costará reparar la plaza después de retirar las instalaciones? Teniendo en cuenta el peso monstruoso de la pista + patinadores, y la infraestructura necesaria para mantener en funcionamiento el mastodonte, me temo que nunca nos lo dirán...
Cuando se estudió el proyecto, hubo miedo de que el suelo de la plaza no soportara el peso de la pista, pero calcularon que la pista sólo ya estaba algo por debajo del peso del público en actuaciones especialmente multitudinarias, y siguieron adelante... ¿pero y el peso de patinadores y público, ¿qué?
También se ha hecho público que se ha agujereado el suelo de la plaza para lograr una conexión eléctrica más potente... ¿harán la pantochada de arreglarlo con parches de otro material, para que las ciudadanas al pasar piensen en los destrozos producidos?
Se dijo el mismo día que se recogió la acampada que reparar la plaça les costaria 240.000 €, y sólo habíamos puesto tiendas de campaña... ¡haced cuentas!
PD: Hoy paso de enlaces... hablo de memoria, no tengo ganas de leer de nuevo los datos exactos sobre el tema, que me sulfuro!
ACTUALIZACIÓN: Para quien quiera más info, copio el resumen que hace Fotomovimiento sobre el tema. Recalco en negritas lo que creo principal:
Con la excusa de animar las ventas navideñas se ha inaugurado una pista de hielo en Plaça Catalunya de Barcelona. El proyecto ha sido llevado a cabo por el Ajuntament de Barcelona y la Fundació Barcelona Comerç.
Esta fundación es una entidad que agrupa a los 16 ejes comerciales de la ciudad, que concentran cerca de 10.000 comercios y facturan más de 7.000 millones anuales.
La pista de hielo cubierta tiene 1.200 metros cuadrados y un coste de instalación aproximado de unos 700.000 euros que irá según el Ajuntament a cargo de varias empresas patrocinadoras.
A lo largo de este año, al colectivo 15M se lo ha acusado falsamente de dificultar el uso del espacio público y sufrió un desalojo duro y contundente por parte de los Mossos d'Esquadra.
Y ahora, el Ajuntament de CiU ha decidido ceder el uso de la plaza a un reducido grupo de empresas privadas para que hagan negocio y promocionen sus marcas.
El coste medioambiental que supone mantener la pista a diario es equiparable al gasto de luz de 65.000 hogares catalanes.
Actualmente Catalunya está sufriendo unos recortes en sanidad y educación que afectan a un sector amplio de la ciudadanía.
Esta pista de hielo nos parece una frivolidad absoluta y de carácter totalmente populista teniendo en cuenta la situación que están sufriendo miles de familias en Catalunya.
Hoy, en el día de su inauguración, los invitados y los políticos han brindado con cava y han disfrutado de un catering. Mientras, gente sin casa, sin comida y esperando en los hospitales sin poder ser atendida...
Bienvenidos a la Navidad de Barcelona!
